jueves, 28 de julio de 2016
El blog de Ediciones Atlantis: Entrevista a José Miguel Biel: "Creo que todo auto...
El blog de Ediciones Atlantis: Entrevista a José Miguel Biel: "Creo que todo auto...: Ediciones Atlantis presenta este sábado en Madrid ‘Cor Draconis’ una novela fantástica, escrita por el autor oscense, José Miguel Biel Bui...
domingo, 24 de julio de 2016
lunes, 18 de julio de 2016
Con una taza de café - Segunda taza
Despertó esa mañana con
un portentoso bostezo. Un olor a adolescencia y a sudor en las sábanas de su estudio.
Había dejado la cafetera
preparada en la noche, para que cuando nada más despertar en la mañana, fuera simplemente
pulsar el botón para que el olor a café inundara la estancia.
Encendió el ordenador de
su escritorio, tras servirse una taza de humeante café, negro como el carbón. Abrió
el navegador, tecleó su dirección de correo electrónico y su contraseña.
Se llevó la taza a los labios
y le dio un generoso sorbo, antes de pulsar el botón, para comentar a escribir un
nuevo correo electrónico.
Buenos
días mi amor
Nuevamente como cada mañana, cumplía con ese ritual,
con su amada. Día tras día, confiaba, más allá de los kilómetros que los separaban,
a aquellas pocas líneas, a ese mensajero virtual, los sentimientos del inmenso amor
que por su amada sentía.
A la espera, de que al fin un día compartirían una taza
de café, endulzada con besos, al fin sin más distancia entre los dos.
Etiquetas:
beneficios del café,
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taza de café
martes, 12 de julio de 2016
Con una taza de café - Prologo
A veces no hace falta
más que una simple taza de café, para dar origen, a la historia más grande, a
la historia más maravillosa.
Entorno a una taza de
café, se pueden contar historias, se pueden idear grandes proyectos, se pueden
escribir las más grandes novelas.
Una taza de café puede
ser sencillamente el inicio de un nuevo día o una pausa de tranquilidad en el
trajín de la jornada, a veces simplemente un café de máquina en una esquina de
la oficina, a veces un café en la cafetería donde se discuten grandes negocios.
Una taza de café,
sencillamente una taza de café, en la terraza de un bar, en una habitación de
hotel, en la cafetería de Paco en tu barrio o en esa cafetería con ya solera
tras de sí.
Un café sólo. Un café
aguado. Un café bien caliente que aún quema en la lengua. Un café con hielo. Un
cortado. Un capuchino. Un café irlandés. Un carajillo. Un café bombón
Un café expreso. Un
café con una nube de nata.
Sencillamente, una taza
de café. ¿O quizás no? ¿Quizás sea algo más?
Con una taza de café - Primera taza
Le despierta el aroma a
café en el ambiente, junto con los primeros rayos del sol que se cuelan por la
ventana del dormitorio.
Se notaba la boca aún
pastosa del alcohol de la noche anterior. En las sábanas grises y arrugadas de
la cama de matrimonio un olor a mujer.
Sobre la mesilla, un
fajo de billetes, con una nota de agradecimiento, firmada con un beso de unos
labios llenos de carmín.
De la mujer no queda ni
rastro. Sólo su olor y las prendas íntimas desparramadas por el suelo de la
estancia le recordaban lo que esa noche había pasado allí.
Una soltera adinerada,
demasiado ocupada en su propio trabajo como para tener una relación seria, que pagaba
por un poco de cariño.
Mientras saboreaba la
taza de café, despojándose de los restos de sueño que aún se aferraban a su
mente, sacó su móvil y llamó a la agencia. No podía seguir haciendo ese
trabajo. Se había enamorado de aquella mujer.
Con un post-it, le
escribió un TE QUIERO a su clienta, ante de salir por la puerta, mientras se
abrochaba la camisa
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